En poco más de dos semanas muchos de los alumnos que han finalizado 2º de Bachillerato se enfrentarán a la EvAU. Algunos irán con confianza, otros orgullosos del trabajo bien hecho durante el curso y algún despistado esperando que pregunten justo lo que se ha estudiado, pero, sin duda, todos irán algo nerviosos. Pues la EvAU es una prueba en la que se ponen a prueba tanto los conocimientos como la gestión de los nervios. No es un examen objetivamente complicado, pero la tensión por estar jugándose una nota que le permita soñar con una carrera u otra les suele atenazar.

¿Qué podemos hacer para llegar en las mejores condiciones?

1. Durante los días anteriores:

Tener un horario claro para cada día. Levantarse y acostarse a una hora fija. Organizar los temarios para repasarlos un par de veces. Tener claros los conceptos fundamentales de cada asignatura. No dar nada por supuesto. No confiarse. Descansa cada día haciendo algo de ejercicio. Aparcar el móvil (ya habrá tiempo en verano). Hacer simulacros con exámenes de anteriores convocatorias y tener claro el protocolo para acertar en la elección de las preguntas en cada asignatura. Intensificar las técnicas mnemotécnicas de memorización. Visitar de modo presencial o a través de la web el lugar del examen para calcular los tiempos de desplazamiento.

2. Se acerca el día de la prueba:

La tarde anterior despéjate dando un paseo con tus amigos o yendo al cine y ríete con ellos hasta caer al suelo. Antes de acostarte deja preparado el material necesario: dni, abono transporte, tus bolígrafos favoritos, calculadora, botella de agua, bocadillos, mascarillas y gel, etc. Desayuna un par de huevos fritos con beicon, zumo y un tazón de cereales. Sal de casa con tiempo suficiente y, cuando te encuentres con tus compañeros en el campus, bromea sobre cualquier cosa.

3. Durante la prueba:

Llegó el momento. Un secreto: el examen es el más fácil de cuantos has hecho durante el curso. Quita los nervios respirando con el abdomen. Lee despacio las preguntas y resuélvelas mentalmente antes de contestar. Piensa antes de escribir. Hazlo con letra clara. Repasa los cálculos, la expresión y la ortografía antes de entregar. Lleva un reloj y ponlo sobre la mesa para controlar los tiempos. Procura dejar un tiempo para el repaso. Si tienes serias dudas sobre una palabra, utiliza un sinónimo; si la tienes sobre el enunciado, pregunta a los examinadores. Comienza por las preguntas que domines y deja para el final las más complejas.

Cuando finalices el examen, olvídalo y prepárate para el siguiente.

Espero que estos pequeños consejos os sirvan para llegar al tan temido examen de la EvAU con más tranquilidad y confianza. Seguro que lo hacéis muy bien.

Don Nicolás Chazarra. Profesor de Lengua y Literatura en 2º de bachillerato. Colegio Andel